Vivimos en la era de la tecnología, las empresas lanzan nuevos productos para mejorar nuestra vida o al menos intentarlo; y el mundo del deporte no es ajeno a estas tendencias ni mucho menos. Cada vez vemos una mayor oferta de centros de electroestimulación, donde se prometen resultados con el mínimo esfuerzo: sesiones de 20 minutos a la semana desarrollan tu fuerza, musculatura y pérdida de grasa… Pero ¿REALMENTE FUNCIONAN?.
Parecen ser que la electroestimulación contradice la idea de esfuerzo-beneficio que tenemos inculcada desde hace mucho tiempo…
Los resultados que consigues serán directamente proporcionales al esfuerzo que aplicas; Denis Waitley
A priori parece muy improbable que se puedan equiparar los resultados de una semana entera de entrenamiento con el método convencional,a tan solo 20 minutos semanales con una sesión de electroestimulación. ¿Tanto ha avanzado la tecnología?
Para obtener una visión critica conozcamos más sobre la electroestimulación…
Tipos de electroestimulación
Familiarizándonos con esta tecnología encontramos principalmente dos tipos:
- Electroestimulación local
Quizá la más conocida, ya que es la gran protagonista en multitud de anuncios de la teletienda. En este caso se colocan los electrodos en el músculo que queremos trabajar y se activa para entrenar ese grupo muscular. La electricidad obliga al músculo a contraerse de forma pasiva.
Suele utilizarse tanto para entrenar o bien para recuperar esa musculatura.
- Electroestimulación de cuerpo completo
Este tipo es el que vemos en los centros deportivos desde los últimos 10 años. Es un chaleco con electrodos que activa de manera simultanea todo el cuerpo. Suele utilizarse mientras se realizan ejercicios simples para aumentar el impacto de estos.
La electricidad recorre todo nuestro toráx y piernas de izquierda a derecha y contrae nuestros músculos de forma pasiva a la vez que se activan voluntariamente con nuestro movimiento. Veremos más adelante como esto tiene potenciales riesgos.
¿Funciona?
La respuesta corta es sí; pero entremos más en detalle… Tiene un aumento del tono muscular si lo comparas con no hacer nada, pero no tiene un mejor efecto que un entrenamiento convencional.
Tiene una aplicación muy práctica en personas con alguna lesión o traumatismo , acelerando su recuperación y evitando la perdida de masa muscular. Además en personas con operaciones quirúrgicas , como vemos en este estudio,mejora la fuerza necesaria para poder iniciar antes un proceso de rehabilitación convencional
Con solo 20 minutos se sobrecargan todos los músculos del cuerpo y el sistema nervioso central. Pero debemos saber que este tipo de entrenamientos como indican los estudios tiene un mejor efecto en personas entrenadas. Lo cual es curioso porque normalmente este tipo de entrenamientos lo realizan personas que nunca han entrenado.
En cuanto al gasto calórico tiene un impacto mayor que un entrenamiento convencional. Pero, el gasto de calorías pertenece a la vía de la glucosa , por lo que, no tiene relevancia en cuanto a la perdida de grasa.
Desde el punto de vista de la mejora de la fuerza también tiene beneficios, como vemos en esta revisión científica , en la cual hubo una ganancia de casi un 20% de fuerza.
Todos estos beneficios se atribuyen en caso de realizar la electroestimulación correctamente. Es decir, sin sobrepasar los 20 minutos semanales; y con una intensidad electrica superior al 50% de la contración voluntaria máxima.
Parece que la ciencia dice que este método funciona , pero ¿ a que precio?
Que se lo digan Elena , Melchor o Jesús 3 casos de personas ingresadas una semana en hospitales de la provincia de Sevilla, por hacer tan solo una sesión de electroestimulación.
Es hora de conocer sus riesgos…
Riesgos y efectos secundarios
Esta claro que, algo que tenga beneficios sin esfuerzo tiene que tener alguna trampa. Como todo pacto hecho con el diablo nunca acaba bien.
Siempre hablaremos sobre la electroestimulación de cuerpo completo ( la que se ve en los gimnasios) , ya que la electroestimulación local es segura, no promete grandes beneficios pero tampoco tiene grandes riesgos…
En primer lugar si eres una persona con epilepsia EVITA a toda costa realizar la electroestimulación , ya que te provocaría un ataque.
La evidencia científica cada vez nos muestra más casos de rabdomiólisis por utilizar estos aparatos. Esto es debido a una destrucción de nuestro tejido muscular por no ser capaz de tolerar el impacto de alta intensidad que produce la electricidad , ya que es un estímulo que no es natural.
Una manera de detectar si tienes rabdomiolisis después de realizar electroestimulación es orinar sangre, o padecer mucho dolor intenso de agujetas (DOMS) . Esto es debido a un aumento en nuestro organismo de la CK ( creatin kinasa) esta proteína nos indica el daño que se ha producido en nuestro organismo.
Como nos indican este estudio hecho en Alemania donde después del entrenamiento con electroestimulación aparecieron concentraciones muy elevadas de CK ( hasta 117 veces su valor) después de 72-96 horas. Tener estos valores muy elevados es peligroso, ya que se asocia con fallo renal agudo
Finalmente existe un gran riesgo cardiovascular al utilizar los chalecos de electroestimulación, esto se debe a que los diferentes polos de electricidad están colocados en diferentes músculos , de esta manera la electricidad recorre todo nuestro cuerpo de izquierda a derecha. Al crear de manera continua esta campo eléctrico, los órganos que se encuentran en la zona del tronco pueden alterar su función. De esta manera utilizar estas técnicas podrían desencadenar en arritmias, insuficiencia cardíaca y accidentes cerebro-vasculares (iptus).
Esto no ocurre con la electroestimulación local , ya que la corriente solo atraviesa un musculo y no tendríamos problemas adversos en órganos vitales como el corazón.
Recomendaciones
Esta claro que la electroestimulación funciona, pero el ratio riesgo-beneficio invita a reflexionar sobre su uso. Personalmente solo usaría la electroestimulación local en aquellos casos donde de inactividad obligada. Como por ejemplo para una recuperación después de una operación o si tenemos una lesión grave y evitar así la perdida de masa muscular.
Nunca utilizaría el chaleco, ¿Para que? Puedo conseguir los mismos beneficios o más con el entrenamiento convencional y sin ningún efecto adverso para la salud. Además como indica este estudio el entrenamiento convencional jamás debe reemplazarse por la electroestimulación, ya que no solo sirve para la construcción de masa muscular, también mejora la función cognitiva, endotelial y miocárdica ( tejido múscular del corazón).
Déjate de cables y enchufes ; un buen entrenador puede hacer más por tu salud que toda la tecnología del mundo junta. No busques nuevas fórmulas , y usa las que sabemos que funcionan …
En caso de que decidas hacer un entrenamiento con electroestimulación ( cosa que no recomiendo) hazlo siempre bajo supervisión médica y con un profesional en un centro de confianza; donde escojan la intensidad adecuada para ti.
La realidad es que si se utiliza con la intensidad y volumen correcto , no supone riesgos a corto plazo ; el problema es que en muy pocos centros se realiza de manera óptima. No podemos decir lo mismo de los riesgos a largo plazo que no desaparecen, como hemos visto en el apartado anterior.
¿Has entrenado con electroestimulación alguna vez? escríbemelo en los comentarios…
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